El sonido del silencio – Comentario de un lugar en silencio (A quiet place, John Krasinski, 2018)
Por Ricardo Diaz
Allá por el 1894 aparecía el cine mudo, aquel que prácticamente estaba formado únicamente por imágenes y se caracterizaba por la ausencia de diálogos. Después de más de un siglo, parece haber regresado a nosotros o por lo menos una parte de él.
Allá por el 1894 aparecía el cine mudo, aquel que prácticamente estaba formado únicamente por imágenes y se caracterizaba por la ausencia de diálogos. Después de más de un siglo, parece haber regresado a nosotros o por lo menos una parte de él.
La idea de realizar una película de horror con toques de thriller sin prácticamente dialogo alguno, de hecho de todo el metraje, menos de cuatro minutos corresponden a parlamentos de los personajes. De esta manera la película de John Kransisnki (The Office, Separándome de mi Ex) es sin lugar a dudas experimental y arriesgada.
Por alguna razón que desconocemos, la tierra ha sido invadida por unos seres alienígenas hiper sensibles al sonido que han diezmado a la población terrestre. Solo muy pocos han logrado sobrevivir, la familia Abbot es una de ellas. Luego de una escena trágica que nos permite saber que la película va por todo y con la intención de paralizarnos, vemos como se han adaptado a estas circunstancias y lo que han hecho para sobrevivir hasta el momento sin emitir sonido alguno.
La familia se compone de Lee Abbot (John Krasinski), Evelyn Abbot (Emily Blunt, Al filo del Mañana, El diablo viste a la moda) y los dos hijos de ellos, Marcus (Noah Jupe, Suburbicon) y Reagan (Millicent Simmonds) quien padece de sordera. La madre a su vez está embarazada y a días de tener el parto, por lo que vemos como insonorizan un cuarto para cuando llegue el pequeño nuevo integrante a la familia.
La ausencia de sonido en el film nos provoca una tensión asfixiante por momentos. La película crea una atmósfera particular que nos absorbe por completo, nos volvemos parte de este grupo de personas, y por eso hasta desde nuestros asientos no queremos ni movernos para hacer ruido. Este hecho es muy meritorio para el realizador. Crea un suspenso casi perfecto, nos hace estar atento a cada sonido que escuchamos.
En este film el ruido es el terror, cada vez que algo se está por caer, o que alguien va a gritar, nos paraliza, porque sabemos lo que eso va a provocar. Una raza alienígena con el aspecto de Venom del universo Marvel y un sistema auditivo hiper desarrollado y sensible. Están siempre al acecho.
Todas las actuaciones son sobresalientes. Emily Blunt se luce como esa madre que aun posee esperanzas y decide traer un niño a ese mundo plagado de aliens. La escena del parto en la bañera mientras esta siendo acechada por una de las criaturas es terrible y te deja sin aliento por lo bien lograda. John Krasinski se luce tanto en la dirección y como su rol de actor interpretando a ese padre, dispuesto a todo por salvar a sus hijos y proteger a su esposa. Un reconocimiento aparte es el de la pequeña Millicent Simmonds que interpreta a la hija sorda (en la vida real la actriz padece de sordera), porque por momentos vemos la película desde el punto de vista de ella. Ella sufre porque no puede oír y vive en un mundo en el que el ruido no puede existir. En esos momentos del film hay ausencia total del sonido, por esos segundos somos como ella.
En una cinta así de experimental, además de un buen director, es necesario que el departamento musical y el de edición de sonido sean precisos para poder crear el ambiente preciso, y darnos las pistas auditivas justas y necesarias para que nos podamos transportar a ese lugar tan callado. Claramente lo lograron. Escuchamos el mínimo detalle, desde las pisadas en el suelo de madera de la granja, las corridas por el camino de arena para apaciguar el sonido, hasta las cataratas de una cascada que emiten un ruido casi ensordecedor, lugar que es como un punto ciego para las criaturas y por lo cual pueden hablar los personajes sin temer por su vida.
Como si fuera poco ILM (Industrial Light & Magic) fueron los encargados de realizar los efectos especiales; por lo que estos seres intolerantes al sonido son únicos. Y son esperados, ya que recién después de la mitad del film los empezamos a ver claramente y en detalle para poder apreciarlos y a su vez temerles.
Como punto en contra podemos decir que los minutos finales luego del clímax están más pensados para una posible secuela que para la historia en sí, y tal vez nos quita parte de toda la adrenalina vivida hasta el momento.
Vivimos en un mundo saturado de sonidos, nosotros mismos nos aturdimos, nos bombardeamos constantemente con ruidos. Lo cual no significa que realmente escuchemos o nos escuchemos. A veces es necesario que algo nos despierte y nos demos cuenta de los que nos estamos perdiendo: el maravilloso sonido del silencio.
Calificación: **** (Muy Buena)
Un lugar en silencio (A quiet Place, 2018) – Director: John Krasinski – Guión: Scott Beck, Bryan Woods, John Krasinski – Reparto: Emily Blunt, John Krasinski, Millicent Simmonds, Noah Jupe – Música: Marco Beltrami – Fotografía: Charlotte Bruus Christensen – Duración: 90 minutos
***** (Excelente) - **** (Muy Buena) - *** (Buena) - ** (Regular) - * (Mala)
Fotos de los textos: Emily Blunt en un lugar en silencio (IMDb)
***** (Excelente) - **** (Muy Buena) - *** (Buena) - ** (Regular) - * (Mala)
Fotos de los textos: Emily Blunt en un lugar en silencio (IMDb)
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